En días nublados, la cantidad de luz solar que llega a los paneles solares disminuye significativamente, lo que afecta su capacidad para generar electricidad. Los paneles solares funcionan mejor bajo luz solar directa y brillante. Cuando el cielo está nublado, la luz solar se dispersa en las nubes y llega a la Tierra con menos intensidad y consistencia.
Sin embargo, esto no significa que los paneles solares dejen de funcionar por completo en días nublados. Todavía pueden producir algo de electricidad, aunque a una tasa reducida en comparación con un día soleado. Los avances en la tecnología solar han mejorado la capacidad de los paneles para capturar la luz difusa, que es la luz que se dispersa en la atmósfera, lo que significa que los paneles pueden generar cierta cantidad de energía incluso en condiciones de luz tenue.
Además, factores como la inclinación de los paneles, su orientación hacia el sol y la calidad del diseño y la instalación también pueden influir en su rendimiento en días nublados. En general, aunque los días nublados reducen la producción de energía de los paneles solares, todavía pueden contribuir a la generación de electricidad, especialmente si se combinan con sistemas de almacenamiento de energía como baterías.